¿Has notado que se complica más tomar decisiones al final del día? Estás muy cansada para decidir qué cocinar o inclusive qué ver en la televisión. Eso se debe a que todos tenemos una cantidad de decisiones que podemos hacer cada día.
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El Beneficio de una Rutina y del Hábito de Tener el Día Ocupado
Sabiendo eso nos ayuda tener prioridades
Podemos reducir el tiempo de decisiones simplemente al implementar hábitos y rutinas. De esa manera ahorramos las decisiones para la cosas importantes. También libera espacio en nuestro cerebro para tener un pensamiento más creativo y productivo.
Rutinas son esa gran herramienta que nos simplifica nuestra vida y reduce en gran manera nuestro estrés diario.
Muy probablemente ya tienes una rutina mañanera
Te levantas y preparas tu café, lees el periódico o checar tu correo electrónico y te preparas un bocadillo antes de meterte a bañar.
Vayamos en más detalle. Si te haces un uniforme, no tendrás que decidir en qué ponerte. Solamente agarras unos pantalones y una playera, o una falda, medias y un suéter, y todo listo para salir.
Implementa algunas rutinas en tu día laboral cuando sea posible. Planear tus comidas te ayudará a saber qué cocinar y comer. Un calendario de limpieza te ayudará a mantenerte al día con tus quehaceres sin tener que usar tiempo valioso en decidir.
Termina tu día con broche de oro al tener una rutina para ir a dormir. Esto no solo te ayudará a tomar buenas decisiones aun cuando estés muy cansado, sino que también te ayudará a quedarte dormido más pronto. Si funciona para tu pequeño de preescolar, funcionara para ti también.
- Comienza por hacer quehaceres que ayudaran a tu mañana siguiente ser más fácil.
- Asegurarse de que la cocina esté limpia y los útiles escolares de los niños estén en orden son algunos ejemplos.
- Haz cosas que te ayuden a relajarte y prepararte para dormir. Lee un libro, escucha algo de música o relájate con un té de herbolarias.
Siguiente, ve si puedes poner otras rutinas en juego
- Siéntate con un pedazo de papel y una pluma (bolígrafo). Piensa que partes de tu día o semana se pueden convertir en rutina.
- Escríbelas y crea una lista de acciones diarias hasta que se conviertan en hábitos y rutinas.
Pasar tiempo tratando de crear rutinas y hábitos hara que tu día corra con más suavidad. Te encontrarás menos estresado y harás más durante tus horas productivas. Eso es algo hermoso. Te permite ahorrarte tiempo en la toma de decisiones y ocuparlo en decidir cosas como a qué parque, qué película ver con la familia o qué juego de mesa usar.
Nuestro Dios es un Dios de orden. Él nos ayudará si se lo pedimos. Poner buenos hábitos en su lugar nos ayudará a ser buenos administradores de todo lo que nos da.
Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto._ Génesis 1:31
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