Cómo Enseñarle a los Niños a Administrar su Tiempo

En un esfuerzo por enseñarles a mis hijos la habilidad de administrar su tiempo, este año mis niños están administrando sus propios horarios.

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¿Se oye raro? Quizás. La realidad es que nuestros niños se acercan cada día a ser adultos, y como buenos padres, debemos entregarles poco a poco las riendas de su vida. Quiero que mis niños aprendan habilidades que les ayudaran a sobrevivir como adultos, incluyendo proyectarse metas y el saber administrar su tiempo. ¿No quisieras que tus hijos experimentaran con actividades importantes en su vida el cómo administrar su tiempo mientras estás cerca para guiarlos? Yo sí.

Y ¿qué mejor que crear un horario realista para llevar un buen ritmo semanal? Esto les ayudará a convertirse en buenos administradores de su tiempo.

Por Qué Quiero Que Mis Hijos Aprendan Acerca de la Administración del Tiempo

¿Quieres enseñarle a tus hijos habilidades tales como: proponerse metas, tener compromiso y saber administrar su tiempo?

Si es así, entonces te animo a sacar tus propias razones del por qué quieres que tus hijos desarrollen estas habilidades en su niñez (porque siendo honesta, no son fáciles de enseñar). Toma mucha perseverancia y práctica enseñar a los niños a administrar su tiempo, ya que hay días que uno misma necesita que se nos recuerde que estamos haciendo esto.

Esta es mi lista del por qué quiero que mis hijos aprendan acerca de la administración del tiempo:

• Quiero que mis hijos experimenten de primera mano el poder de decir no a esa cosa para poder decirle si a algo más.
• Quiero que mis hijos se den cuenta de todo el tiempo libre que en realidad tienen, y de cómo pueden utilizar más sabiamente ese tiempo libre (una táctica del enemigo es evitar que los niños experimenten un verdadero propósito del tiempo al mantenerlos distraídos con actividades sin sentido).
• Quiero enseñarle a mis hijos a crear hábitos exitosos en sus vidas diarias, y el cómo esos pequeños hábitos pueden producir grandes resultados.
• Quiero que tengan una participación en su ritmo diario para que lleguen a tener un respeto hacia él y tengan la tendencia de seguirlo.
• Quiero enseñarles que un horario y las rutinas son siervos de nosotros, y no nosotros de ellos.

¡Como quisiera que alguien me hubiese enseñado eso de niña! Tuve que ingeniármelas ya siendo adulta.

¿Qué de ti? ¿Cuáles razones agregarías a la lista?

5 Cosas para Recordar cuando le Estés Enseñando a tus Niños Acerca de Administrar Su Tiempo

1.   Hazlo de acuerdo a su edad

Cada niño es diferente, pero mi pensar es que si tiene la capacidad para leer bien entonces podrá aprender a administrar su tiempo. Claro está que tendremos que ayudar y guiar más a los más pequeños (o aquellos que nunca han seguido una rutina).

2.   Dales libertad para escoger con límites bien establecidos.

Esto es algo que asombrará a tus niños: Diles que no tienen que pedir permiso para hacer algo que previamente ha sido escrito en su rutina semanal. Si dice que es tiempo para almorzar en su horario, pueden comenzar a comer sin ti. Si está asignado descanso, pueden tomar un descanso de su tarea. ¡A mis niños les encantó la idea! Y yo estoy de acuerdo siempre y cuando …

3.   La rutina refleje las expectativas familiares

Tenemos reglas en la casa como: “no hay tiempo libre antes de terminar quehaceres y tarea”. Así es que, aunque le damos a nuestros hijos la libertad de hacer sus horarios estos deben encajar perfectamente en las reglas del hogar.

4.   Predica con el ejemplo teniendo buenas rutinas y metas programadas en tu vida y habla de ello con tus hijos (los errores y los aciertos).

Cuando me reúno individualmente con mis hijos para enseñarles acerca de administrar su tiempo, traigo una copia de mi propio horario para mostrarles como me ayuda. Ellos pueden ver como una rutina me ayuda a cumplir con mis responsabilidades de la familia y poder cumplir metas personales que me son importantes como la lectura de la Biblia o el hacer ejercicio.

5.   Date cuenta que la administración del tiempo es un proceso de aprendizaje para los niños también.

¡Es un experimento! Tu niño puede que no siga al pie de la letra su rutina (especialmente al principio) y está bien. Honestamente yo misma no sigo mi horario exactamente porque cada día es diferente en sí (es por ello que me gusta pensar en esto como un ritmo en vez de un horario).

Si un niño se sale de su rutina, simplemente lo animo a reconsiderar su horario y ver cómo puede planear mejor lo que está pasando en su vida.

Intenta Estas Actividades de Administración del Tiempo para Niños

1)   Lleva a tu niño a una corta pero divertida cita de madre – hijo.

Pídele llevar consigo un lápiz y una hoja con rayas, dile que van a un lugar especial (querrás llevar una laptop si tienes una).

Obviamente puedes llevarlo a un lugar silencioso en la casa en donde se pueda trabajar (si tu casa tiene uno… la mía no lo tiene). A mí en lo personal me gusta llevar a mis niños a alguna cafetería o poner una casa de campaña para hacer de la ocasión algo más especial.

También ayuda a empezar con alguna frase de ánimo como “estas creciendo y estoy emocionada que puedas tener esta libertad”, dependiendo de la edad del infante claro está.

Además, es mucho más divertido hablar acerca de horarios con un buen café en la mano ¿cierto?

2)   Ayúdale a identificar sus metas/actividades para el año.

Algunas de estas serán obvias (y quizás no muy glamurosas) como: escuela, responsabilidades en el hogar y quizás práctica de deporte/música.

Algunas de sus actividades serán influenciadas por otro hermano (por ejemplo, el que tenga que asistir a la práctica de gimnasia de su hermana los martes debido a que no hay quién cuide de él en la casa).

Cuales sean, ayúdale a hacer una lista en una hoja de papel.

3)   Enséñale el por qué administrar el tiempo es importante.

Yo les digo a mis hijos que la rutina es simplemente un plan para cumplir nuestras metas propuestas dentro de las realidades del día. No es algo grabado en piedra que no se pueda cambiar, pero es un organigrama que convierte sueños en realidades.

Al principio, se podría sentir que el ritmo del horario está muy apretado, pero en realidad ser bueno en la administración del tiempo pondrá barreras protectoras a nuestras prioridades.

También les comparto que se hace más fácil el decir si o no a ciertas actividades en nuestras vidas porque lo vemos impreso en un papel si realísticamente tenemos el tiempo necesario para comprometernos.

Nota: Madres, ¡un horario para nuestros niños así nos salvará de dolores de cabeza (y será una rápida solución a argumentos)! Si un niño pide participar en una nueva actividad y tenemos que decir que no por el tiempo requerido, nuestros hijos entenderán que esa actividad no encaja en su horario. ¡Arriba el eliminar (espero) menos discusiones!

4)   Crea una versión en papel de la rutina de tu hijo.

En la columna de la izquierda (antes de la línea roja del papel), escribe las horas del día (empezando cuando se levanta) por secciones de media hora. Da a cada línea media hora (6:00 – 6:30; 6:30 – 7:00; 7:00 – 7:30 y así sucesivamente) cada sección teniendo su línea en la columna.

Después, en la parte de arriba pon los días de la semana (uno en cada columna).

Siguiente, reserva tiempo para cortar bloques de tiempo para cada actividad. Esto te ayudará a  que te sea más fácil acomodar y reacomodar las actividades en el horario.

Empieza por llenar esos espacios que no son negociables que ya se tienen en el horario (la escuela por ejemplo). Después agrega quehaceres y otras responsabilidades (en nuestra casa, incluye la lectura bíblica). Por último, muéstrale a tus hijos en dónde están los espacios para llenar y pregúntales cómo les gustaría usar ese tiempo (si es posible, pide que tus niños literalmente lo hagan para que sientan que es “su” horario).

Borra, reacomoda y trabájalo hasta que tú y tu hijo esten feliz en cómo se utilizará el tiempo.

Yo siempre me aseguro de mostrarles cuanto tiempo libre en realidad tienen para utilizar o jugar si siguen su horario… porque regularmente tienen mucho (¡en especial los más chicos!). Esto los motivara a empezar a seguir su horario.

5)   Enséñale a cómo crear una hoja de cálculo en la computadora para administrar su tiempo.

Aquí está mi teoría: Hacemos todo el acomodo del horario en el papel y después lo transcribimos a la computadora para, 1) no se pierda y 2) puede ser modificado de una manera rápida y sencilla.

Rutinas siempre están cambiando porque la vida de la familia está en un cambio constante ¿cierto? Hazlo más fácil para ti y para tu niño al mantener su horario en una hoja de cálculo en la computadora.

Es por ello que no utilizo uno de esos hermosos calendarios impresos que venden. Aunque son muy bonitos, no son prácticos a la larga porque no te permiten hacer modificaciones.

Le muestro a mi hijo el cómo rehacer la misma hoja de cálculo en la computadora. El cómo poner el tiempo a un lado, los días de la semana arriba y el cómo unir celdas y ponerles color.

Le permito a mi hijo agregar la mayoría de la información en su tiempo libre, o si no tiene la edad suficiente para hacerlo por sí mismo, lo hacemos juntos.

6)   Coloca una copia del horario (los horarios) en un lugar transitado en la casa.

Nuestros horarios están en la cocina para que todos podamos saber en dónde se supone que cada miembro de la familia está en cierto tiempo del día. Esto nos ayuda a mantenernos enfocados y a hacer nuestro mejor esfuerzo para lograr nuestras metas durante el día.

7)   Revisa regularmente con tu hijo para ver cómo se han desarrollado sus habilidades en la administración del tiempo.

Una vez que el horario ha sido creado, dale una o dos semanas para ver cómo funciona. Nuevamente, las rutinas siempre están cambiando; la rutina nos debe servir a nosotros y no nosotros servirle a la rutina.

Pregúntale a tu hijo cosas como: ¿tienes suficiente tiempo para X o Y actividad?, ¿hemos agregado nuevas actividades?, ¿piensas que estás al corriente con tu tiempo para cumplir todas tus metas diarias?

Ayúdale a tu hijo a modificar o ajustar su horario con el constante cambio que su rutina y metas sufren. Y si ves que su horario no está funcionando, deséchalo y házlo completamente de nuevo.

Y… ¡eso es todo! Se trata de un proceso de aprendizaje, el enseñarle a tu niño a administrar su tiempo realmente se llevará de la mano con la enseñanza de administración personal.

por Alicia Michelle, Your Vibrant Family – usado con permiso.