Cuando educamos en casa, una de los mayores beneficios es la flexibilidad. Dependiendo de los hijos, podemos adaptar la enseñanza a ellos mismos. Cada día puede ser diferente. Cada asignatura puede ser una aventura—o podemos mezclar historia, lenguaje y ciencia en unidades. Tenemos el privilegio de enseñar a nuestros hijos de la manera que mejor aprenderán. Pero, como padres que educan en casa, a veces la flexibilidad pueda resultar demasiada. Los niños necesitan cierto nivel de rutina también.
Sugiero las siguientes ideas para establecer rutina en su “escuela.”
Por supuesto, cada hogar es diferente. Si hay un bebé en casa, por ejemplo, la familia funcionará de otra manera. Por eso, son ideas generales y se puede adaptarlas a su propia familia.
- Se levantan a la misma hora todos los días. No deje que nadie duerma hasta las diez de la mañana, si no está enfermo. Todos los días empiezan más o menos a la misma hora con todos los niños juntos.
- Empezar el día con ciertas expectativas: hacer la cama, vestirse, lavarse la cara, ayudar con el perro, etcétera.
- Desayunar juntos, todos los que puedan. Empezar el día con un tiempo juntos y con una comida sana. Los niños aprenden mucho mejor con el estómago lleno y empezando el día con algo de proteínas. También, provee usted con un poco de tiempo con los hijos “fuera” del ambiente escolar.
- Empezar la escuela justo después de desayunar. Arranque los estudios en seguida. Ponga “manos a la obra.” ¿Por qué? Porque quiere tener tiempo después de las horas escolares para hacer otras cosas.
- Durante las horas de escuela, haga escuela. Debe ser el tiempo dedicado para educar a los hijos. Debe ser un tiempo casi exclusivamente para enseñanza. (Sí, se puede poner la lavadora o fregar platos mientras educas a los hijos, pero mayormente este tiempo es dedicado a la enseñanza.) Creo que una de las razones que algunas familias fracasan en la enseñanza en casa es que se olvidan que es una verdadera tarea para todos los días escolares. Hay que tomarlo en serio.
- Tenga en cuenta a los vecinos. Es muy aconsejable tener su escuela en las horas que los niños vecinos tienen escuela. Así, sus hijos no están fuera jugando en el jardín cuando los hijos de los vecinos están en clase. No deje a los hijos salir a jugar hasta que los vecinos pueden estar jugando también. Si usted hace esto, no escuchará quejas de los vecinos que sus hijos “no estudian; solamente están jugando.” Cuando los vecinos vean que usted guarda un horario, eso crea respeto.
- Termine su escuela en una hora normal. No es bueno enseñar todo el día. Los hijos deben de trabajar bien unas horas y después tener tiempo para ensayar música, correr, leer, jugar y disfrutar. Es saludable para los hijos tener tiempo libre cuando ellos pueden inventar y jugar.
- Tome un tiempo a solas con Dios. Elija un tiempo cada día cuando pueda abrir la Biblia, orar, y escucharle al Señor. Con la ayuda de Dios, serás una mamá y profesora mejor. Juan 15:5 dice, Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí, nada podéis hacer. Dependemos de Él.
¡Que el Señor le bendiga!